domingo, 28 de abril de 2024

ARTE DE INFLUENCIAR

 

EL ARTE DE INFLUENCIAR

1 Libro Autor Tommy Spaulding

Editor Obelisco

PRIMERA EDICIÓN

 

LIBRO POR ENCARGO

CÓMO PROVOCAR UN IMPACTO DURADERO Y QUE CAMBIE

TU VIDA EN TUS INTERACCIONES COTIDIANAS

Los investigadores creen que una persona corriente influirá sobre hasta

80,000 personas –es decir, 2,8 personas al día– tanto positiva como negativamente a lo largo de su vida. Si prestáramos atención a este hecho, ¿qué haríamos de manera diferente?

¿Actuaríamos de manera distinta?

¿Serían también diferentes nuestras interacciones con familiares, amigos y colegas? ¿Acaso dedicaríamos más tiempo a centrarnos en las personas que tenemos delante y menos en las redes sociales y los teléfonos móviles? Tommy Spaulding cree que la respuesta es sí… Spaulding aborda el tema de la influencia y el impacto en esta guía práctica que es a la vez convincente y profundamente personal

El autor: Tommy Spaulding; explora cómo podemos ser más conscientes y efectivos a la hora de ejercer la influencia que cada uno de nosotros tiene sobre los demás: en nuestras profesiones, en las interacciones cotidianas y en las relaciones que cultivamos a lo largo de la vida

Compartiendo historias de líderes excepcionales con los que ha trabajado a lo largo de los años, desde empresarios que han tenido un impacto que va mucho más allá de sus negocios hasta un profesor que cambió la vida de treinta estudiantes con una simple lección, Spaulding nos ofrece una receta sencilla para transformar las transacciones en interacciones

Su libro: EL ARTE DE INFLUENCIAR; es un manifiesto sobre las acciones cotidianas que podemos llevar a cabo para influenciar positivamente en las personas que queremos y lideramos. El arte de influenciar ofrece algo más que «pensamientos y oraciones» a las personas necesitadas y transforma nuestras vidas

PRÓLOGO

CINCUENTA CARTAS

Cincuenta y un días antes de mi quincuagésimo cumpleaños, viajé con Southwest Airlines con destino a Denver. Fue un vuelo muy movido y la señal del cinturón de seguridad se mantuvo parpadeando. Cuando iniciamos el descenso, nos topamos con una zona de turbulencias y el avión descendió unos centenares de pies. El equipaje cayó, las bebidas se derramaron y los pasajeros gritaron. Como mucha gente en estas situaciones, me puse a rezar. Salvo que no rezaba para que el avión se recuperara su altitud, sino para que se estrellara

Quería dejar de vivir. Si el avión hubiera caído, mi familia hubiera conseguido un buen acuerdo con el seguro y yo podría haber tenido una muerte digna sin que nadie supiera lo dolorosa que se había vuelto mi vida. Pero el 737 consiguió estabilizarse y aterrizamos sanos y salvos en Denver. Mientras observaba a los otros pasajeros desabrocharse los cinturones de seguridad, enviar mensajes de texto a sus seres queridos y continuar con sus vidas, sentí una terrible ola de vergüenza. Un accidente de avión habría resuelto mis problemas, pero los otros pasajeros del avión no deseaban morir. Los problemas de una persona no valen la vida de cien personas inocentes

La verdad es que en ese momento había perdido toda esperanza. No podía ver lo bueno de las personas; sólo veía cinismo, engaño y odio

Era el resultado de una tormenta perfecta de tres situaciones horribles que colectivamente habían llegado al punto álgido

El primero involucraba al exesposo de mi esposa, Jill. Cuando conocí a Jill hace casi veinte años, estaba divorciada y tenía un hijo de tres años, Anthony. Inmediatamente me enamoré de los dos y proponerle matrimonio sigue siendo la mejor decisión que he tomado en mi vida

Cuando Jill y yo tuvimos nuestros propios hijos, estaba decidido a que Anthony se sintiera igualmente amado. También estaba decidido a incluir a su padre, Mike, en nuestra familia

Al principio, a Mike no le gustaba la idea de otra figura paterna en la vida de Anthony, pero se entusiasmó conmigo. Jil y yo lo invitábamos en los cumpleaños y otros días festivos. Mike y yo fuimos a ver partidos de hockey con Anthony. Incluso pasamos unas vacaciones juntos en México como una gran familia. Pero a medida que Anthony y yo nos íbamos acercando, Mike se volvió verbalmente abusivo conmigo. Cuando las amenazas comenzaron a ser serias, llamé a la policía y un juez dictó una orden de alejamiento de por vida: su acoso se había vuelto muy grave. Pero el daño ya estaba hecho y la terrible experiencia llevó a mi familia al límite

La segunda situación involucró a una mujer con la que me había asociado para implementar un programa de desarrollo de liderazgo para organizaciones. Tenía mucho talento, pero después de seis meses quedó claro que nuestros valores no concedían y me retiré del negocio. Unos meses más tarde, mi familia, mis amigos y mis clientes más cercanos se reunieron con motivo de la publicación de mi segundo libro, The Heart – Led Leader. Fue uno de los momentos más felicites de mi vida, hasta que un hombre se acercó a la mesa en la que estaba firmando libros para entregarme unos papeles. Mi antigua socia me reclamaba la mitad de todos mis derechos de autor y honorarios de orador futuros. Su abogado me amenazaba con arruinarme si no aceptaba. Cuando abordé ese vuelo de la Southwest, la demanda me había costado más de cien mil dólares en abogados

Finalmente, mientras batallaba en los tribunales, tomé la peor decisión comercial de mi vida: compré una franquicia de una cadena de sándwiches. Tenía el sueño de contratar a niños de secundaria desfavorecidos y enseñarles habilidades de liderazgo en el puesto de trabajo. Lo tenía todo planeado, excepto cómo administrar una tienda de sándwiches. La ubicación de mi tienda era horrible, estaba ligado a un contrato de alquiler a largo plazo y en poco tiempo estaba perdiendo más de 10,000 dólares al mes y me encontraba al borde de la bancarrota

Esencialmente estaba viviendo dos vidas. La primera era como Tommy Spaulding, autor de éxitos de ventas que daba conferencias inspiradoras ante multitudes. Este Tommy Spaulding era un experto en liderazgo con una familia totalmente estadounidense que hacia coaching a todo el mundo, desde directores ejecutivos de la lista Fortune 500 hasta estudiantes de secundaria. Pero, cuando las luces se apagaban y la multitud se iba a casa, cuando los cheques se compensaban y la música se apagaba, yo era Tommy Spaulding, el fabricante de sándwiches fallido que vivía fuera con una maleta. Este Tommy Spaulding tenía una demanda de millones de dólares y viajaba por trabajo 250 días al año para no tener que renunciar a su casa o sacar a sus hijos de la escuela privada. Este Tommy Spaulding enseñaba habilidades de liderazgo a miles de personas, luego se subía a un avión y rezaba que se estrellara

A la mañana siguiente de ese vuelo, estaba tumbado en la cama. Era la primera vez en semanas que me hallaba en casa. Normalmente soy madrugador, pero me sentía tan deprimido que era incapaz de levantarme. Mi mente estaba inquieta por todas las cosas que tenía que hacer, todo el dinero que debía gastar en abogados, toda la gente que me había hecho daño. Entonces sin avisar, irrumpió en la habitación con una docena de globos. Abrió de golpe las cortinas y nos inundó la brillante luz del sol. Mis ojos apenas tuvieron tiempo de adaptarse antes de que me saltara sobre la cama y sonara <Bithday> de los Beatles a todo volumen en un altavoz bluetooth

-¡Es tú cumpleaños!- gritaba mientras bailaba encima de mí, ¡Es tu cumpleaños!

<Oh, Dios mío> pensé, todavía medio dormido. Pensé que era yo el que estaba perdiendo la cabeza

-Cariño, mi cumpleaños no es hasta el 31 de agosto- dije con la voz ronca

-No, Tommy- dijo ella mientras Paul y John cantaban <They say it´s your birthday / We´re gonna have a good time>. Hoy faltan exactamente cincuenta días para que cumplas cincuenta años. Y vas a recibir hoy tu primer regalo

-¿Me has comprado el Porsche? –bromeé

Cuando jill me preguntó unos meses antes que quería para mi cumpleaños, le dije un Porsche 911 plateado. No podíamos permitírnoslo, pero conducirlo por Denver con la capota bajada era, literalmente, la única forma que podía imaginar de ser feliz

-No- dijo Jill, todavía saltando sobre mis piernas-. Te tengo algo mucho mejor

Entonces se bajó de la cama, bajó el volumen de la música y me entregó una carta escrita a mano. Y continúo hablando:

-Como te he dicho, faltan cincuenta días para que cumplas cincuenta años. Te voy a regalar una de éstas cada uno de estos cincuenta días. Aquí va la primera

Sentí un peso en la boca del estómago cuando reconocí la elegante caligrafía. Era de mi madre. Ella y yo tuvimos una relación buena pero desafiante cuando yo era niño. Mi Madre me quería profundamente, pero tenía una manera única de demostrarlo. Gobernaba la casa con mano de hierro y me encargaba más tareas que a todos mis amigos juntos. Una cosa que no podía soportar era que, después de mis fiestas de cumpleaños, arrojara una pila de papeles en blanco sobre la mesa

<Ahora escribe una nota de agradecimiento a todas las personas que han venido a la fiesta>, exigía. Tuve grandes cumpleaños católicos italianos cuando era niño, así que tenía que escribir docenas y docenas de cartas. Ella las revisaba una a una, y si alguna parecía genérica o carecía de sentimiento, tenía que volver a escribirla

Pero ahora, décadas después, me estaba escribiendo una carta para mi cumpleaños. Era lo más hermoso que jamás había leído. Me explicaba cuánto me quería. Me decía lo argulloso que se sentía de las cosas que estaba haciendo por todo el mundo y de todas las vidas que había cambiado. Leí y releí esa carta, y cada vez lloré más. Finalmente miré a Jill, que también estaba llorando

-Feliz cumpleaños, cariño- dijo

Jill me entregó otra carta cada uno de los siguientes cuarenta y nueve días. Mi amigo Byron me dio las gracias por cambiar la vida de sus dos hijos. Mi agente literario, Michael, me dijo que ahora es más amable con la gente gracias a mi influencia. Mi mentor Jerry me dijo que me quería como un hijo. Mi técnico de climatización, Russ, escribió que le había enseñado a amar profundamente. Etcétera, etcétera. Todo el mundo me decía no sólo cuánto me querían, sino cuánto había influido en ellos. Cómo los había ayudado a ser mejores hijos, mejores hijas, mejores padres, mejores parejas, mejores jefes. Cómo les había enseñado a liderar y cómo los había inspirado a servir a los demás

Ahora, en mis peores momentos, me estaban influenciando con sus hermosas cartas. Y me salvaron la vida

Con cada día que pasaba, con cada carta, la niebla se disipa. Mis tres terribles problemas parecían más manejables. Los abogados parecían menos desagradables. Mi depresión parecía menos profunda. Ya no era el hombre que se subía a un avión y rezaba para que se estrellará

Puede que Jill no me hubiera regalado un Porsche plateado por mi quincuagésimo cumpleaños, pero me había regalado algo infinitamente más importante

Me dio El arte de influenciar

80,000

Imagina esta escena: dentro de muchos años, después de morir rodeado de tus seres queridos, entrarás en el crepúsculo nebuloso entre la vida y la muerte. Todavía no estás en el cielo, sino junto a un enorme estadio

Para mí, es el Empower Field at Mile High (Colorado), hogar de los Denver Broncos. Para ti, tal vez sea el Lambeau Field en Green Bay (Wisconsin); el MetLife Stadium en East Rutherford (Nueva Jersey); el Notre Dame Stadium en Indiana; el Estadio Nacional de Beijing, o el estadio de Wembley en Londres. El recinto está lleno hasta la bandera: 80,000 personas. Pero esas personas no están allí para ver un espectáculo deportivo. Están allí para despedirse de ti

La multitud murmura y se pone de pie cuando te acercas al centro del campo. Muchos de los rostros son de personas que conoces: amigos, familiares, vecinos, compañeros de trabajo... Pero a los demás sólo lo reconoces vagamente: antiguos clientes y empleados, amigos de amigos, compañeros de clase, tu electricista, el entrenador de baloncesto de tu hija, el cartero... Éstas son las relaciones transaccionales en tu vida en las que rara vez piensas. Las personas que no recuerdan tu nombre, pero que recuerdan cómo las trataste. ¿Estarán estas 80000 personas vitoreándote, aplaudiendo y coreando tu nombre para darte las gracias por la influencia positiva que has tenido sobre sus vidas?

¿O se quedarán en silencio? Peor aún, ¿la multitud abucheará y maldecirá tu nombre?

Aquí surge una pregunta aún más importante: si supieras, justo en este momento, que todas las personas a las que has influenciado te estarían esperando en un estadio al final de tu vida, ¿cómo te afectaría hoy? ¿Dirigirías y amarías de manera diferente? ¿Tratarías a la gente un poco diferente? ¿Quizás muy diferente?

Hace unos años, mi programa juvenil sin ánimo de lucro, la National Leadership Academy, organizó nuestra recaudación de fondos anual Book-n-Benefit. Siempre presentamos un discurso inaugural de un autor superventas, y ese año invitamos a mi amigo Jon Gordon, autor de El bus de la energía

El poder de un equipo positivo y otros libros superventas. Adoro a este hombre, y me encuentro entre los millones que leen religiosamente sus libros. Jon es un orador sensacional y, como el resto de la audiencia ese día, estaba pendiente de todas y cada una de sus palabras

Al terminar su intervención, Jon dijo algo que me conmovió profundamente: «He oído hablar sobre un estudio reciente que demuestra que una persona normal influirá sobre la vida de unas 80000 personas, positiva o negativamente»

Sentí que todo se quedó en silencio mientras asimilábamos esas palabras. «Influenciamos a 80 000 personas en nuestras vidas». Empecé a hacer cálculos en mi cabeza. Si divides 80,000 por la esperanza de vida media (78 años), obtienes 1025 personas afectadas al año o, lo que es lo mismo, 2,8 personas al día. Todos los días, dos o tres personas se cuelan en tu estadio y se preparan para animarte, abuchearte o simplemente sentarse tratando de averiguar quién eres

Puedes elegir ser una buena influencia o puedes elegir ser una mala. Es así de sencillo. ¿Se llenará tu estadio con 80 000 vítores o con abucheos? La decisión es tuya. Las 80 000 personas de tu estadio no recordarán cómo las manejaste o las dirigiste. No recordarán qué productos les vendiste o qué servicios les ofreciste. Simplemente recordarán tus acciones y tus palabras que cambiaron sus vidas: tu legado de influencia

En su sentido más básico, «influencia» significa tener un efecto duradero sobre el carácter o el comportamiento de otra persona

Dicho de otra manera, las personas en los estadios más bulliciosos, esos campos ruidosos en los que la gente del gallinero incluso golpea las vallas y grita, son las más influyentes. No te culpo si esa palabra te hace temblar sigue adelante y busca en Google la palabra «influencer» y mira qué aparece

Los principales éxitos son sitios como «Marketing de in- fluencers», «Los mayores influencers en TikTok» o «Cómo ganar dinero siendo un influencer en las redes sociales». En otras palabras, ser un influencer va de ganar dinero haciendo que otras personas compren cosas. Sí, no es exactamente el mensaje más inspirador del mundo. Tal vez si eres una de los Kardashians, tendrás un estadio lleno de personas que han comprado productos gracias a tus publicaciones en Instagram

Pero para el resto de los mortales, ser una persona influyente significa algo mucho más personal

Una de las personas más influyentes que conozco es mi esposa, Jill

Cuando me encuentre en su estadio un día animando furiosamente, no voy a pensar en cómo me influenció para afiliarme al Marriott Vacation Club, sino que estaré pensando en cómo me salvó la vida con sus cincuenta cartas. La verdad es que «influencia» se ha convertido en una palabra negativa. Se asocia con manipular a las personas, con conseguir que hagan algo que te beneficie. Si bien es fácil culpar a Kylie Jenner, Dwayne «The Rock» Johnson y otras estrellas de las redes sociales a quienes se les paga millones de dólares por publicar sobre el tequila, la palabra «influencia» se degradó mucho antes de que se inventara Instagram

El libro por excelencia sobre la influencia es Cómo ganar amigos e influir sobre las personas, de Dale Carnegie. Desde su publicación en 1936, el libro ha vendido más de treinta millones de copias y ocupa el puesto número 19 en la lista de la revista Time de los cien libros más influyentes. He hablado mucho sobre cómo Dale Carnegie cambió mi vida, sobre cómo su libro hizo que enviara notas manuscritas, formulara preguntas significativas, evitara conflictos innecesarios y conectara con la gente. Me encantaba Cómo ganar amigos e influir sobre las personas y todavía me gusta, pero a medida que iba madurando, comencé a leerlo más detenidamente

Por ejemplo, éstos son algunos de los títulos de los capítulos: «Aumentar su popularidad», «Lograr que los demás piensen como usted», «Permitirle ganar nuevos clientes» y «Aumentar su capacidad para generar ingresos». Carnegie incluso nos enseña cómo «dejar que la otra persona sienta que la idea es suya»

¿Ves un patrón?

Todo depende de ti.

¿Crees que las 80 000 personas que llenaron tu estadio recordarán cómo las convenciste para que pensaran como tú? Probablemente no

Te animarán porque las ayudaste a ser mejores padres, mejores cónyuges, mejores hermanos, mejores gerentes y líderes. Recordarán cómo las inspiraste a convertirse en mejores seres humanos. Recordarán los tiempos en que las quisiste y las serviste. Te vitorearán porque invertiste verdaderamente en ellas. Necesité media vida para entender que no es lo que puedes conseguir de esas 80 000 personas, sino lo que les das

En mi primer libro, It’s Not Just Who You Know, escribo sobre la importancia de construir relaciones genuinas y duraderas. Comparto que invertir desinteresadamente en la vida de los demás es lo más importante que podemos hacer por nosotros mismos, por nuestras organizaciones, por nuestras comunidades y por nuestro mundo

En mi segundo libro, The Heart-Led Leader, trato cómo los líderes auténticos viven y lideran desde el corazón, y cómo sirven a los demás antes que a sí mismos. Pero en los años posteriores, me he enfrentado a algunas preguntas candentes:

¿Qué habilidades específicas necesitan los líderes para

tener un impacto capaz de cambiar la vida?

¿Qué hábitos practican cotidianamente?

¿Qué decisiones tomamos inconscientemente día tras

día que tienen un gran impacto sobre los demás?

Y finalmente, y lo más importante, ¿cuál es el mayor legado de un líder?

La respuesta a esa última pregunta, como probablemente ya habrás adivinado, es la influencia. En este sentido, es fácil definir la mala influencia Probablemente hayas tenido uno o dos jefes que hayan tratado de influir en ti a través del dominio y la manipulación. Estas personas confían en el miedo y la intimidación para conseguir lo que quieren

 

Por otro lado, es posible que hayas tenido ese jefe que siempre ha reconocido tus esfuerzos, nunca te ha echado el muerto encima y ha invertido en tu carrera. En la escuela, tal vez tuviste un profesor que te dio una segunda oportunidad después de una mala nota o que siempre hizo que aprender resultara divertido. O un amigo que siempre ha dado la cara por ti en tus momentos más difíciles

Algunas personas influyentes pueden ser directores ejecutivos, entrenadores o presidentes, pero la mayoría lleva vidas más tranquilas. Construyen relaciones auténticas y dan sin esperar nada a cambio. Constantemente se preguntan «¿Cómo puedo ser útil hoy?»

He tenido la suerte de conocer a miles de personas influyentes en mi vida, la inmensa mayoría de las cuales no has oído hablar nunca de ellas. He conocido personas influyentes de muchas razas, géneros y orientaciones sexuales

Son originarias de diferentes países. Algunas votan a los demócratas y otras a los republicanos. Viven en entornos rurales y en las grandes ciudades. No tienen casi nada en común excepto cuatro rasgos fundamentales: la capacidad de animar, abrazar, actuar y entregarse a los demás, en otras palabras, de LIDERAR

En los próximos cuatro capítulos, voy a contarte cuatro historias sobre cuatro personas excepcionales que encarnan esas cualidades: un profesor de matemáticas de secundaria, un jugador de hockey de nueve años, un líder de una pandilla y una monja católica. No puedo pensar en cuatro personas que sean menos parecidas, excepto en su capacidad para liderar e inspirar a otros a través del poder de la influencia positiva

Después de eso, profundizaremos en lo que significa LIDERAR a otros. Significa llegar al corazón mismo de la influencia: interés, inversión e intención, o lo que yo llamo «las tres íes de la influencia»

Ésta es la promesa que te hago: si te comprometes a vivir una vida de influencia positiva, ya no volverás a ver nunca más tus relaciones personales y profesionales de la misma manera. Si te comprometes a construir una cultura de influencia en tus equipos y dentro de tus organizaciones, serás testigo de unos resultados y unos éxitos sin precedentes

Terminarás cada día sabiendo que has cambiado la vida de alguien para mejor. Y como descubrí durante los cincuenta días previos a mi quincuagésimo aniversario, cuando estés hecho polvo, cuando la vida te haya dado limones, las mismas personas sobre las que has influido a lo largo del camino te levantarán y te llevarán a casa

Como he llegado a aprender, el liderazgo no va de influencia. El liderazgo es influencia. Las 80,000 personas que conocerás a lo largo de tu vida serán mejores o peores según la influencia positiva o negativa que hayas tenido sobre ellas. La decisión es tuya. Sigue leyendo: emprenderemos un viaje para comenzar a llenar tu estadio

¿QUIÉN ES EL AUTOR TOMMY SPAULDING?

Es el fundador y presidente de Tommy Spaulding Leadership Institute, una organización de capacitación en el desarrollo de liderazgo con sede en Denver. También fue presidente y director ejecutivo de la organización de liderazgo globalUp White People. Reside en Denver (Colorado). Puedes consultar sus redes sociales

ÍNDICE:

=  Portada

=  El arte e influenciar

=  Créditos

=  Prólogo

PARTE I

CUATRO EJEMPLOS DE PERSONAS INFLUYENTES

=  Animar: Treinta y seis hojas de papel

=  Abrazar: El capitán

=  Actuar: El líder de la banda

=  Entregarse: ¿Qué hay en tu maleta?

PARTE II

LA PRIMERA <<I<< DE LA INFLUENCIA INTERÉS

500,000 dólares en footiongs

=  Todo el mundo tiene una historia

=  Transforma las transacciones en interacciones

=  Haz de la amabilidad algo normal

PARTE III

LA SEGUNDA <<I>> DE LA INFLUENCIA INVERSIÓN

=  ¿Cuál es mi legado?

=  Sé dueño de tus palabras

=  Inicia una racha de influencia

=  Sé un ángel inversor

PARTE IV

LA TERCERA <<I>> DE LA INFLUENCIA INTENCIÓN

=  Arma de doble filo

=  Las personas influyentes comen las últimas

=  ¿Eres un egoísta?

=  Pide ayuda

PARTE V

EL CICLO DE LA INFLUENCIA

=  Águilas y gaviotas

=  La importancia del yo en la influencia

=  Multiplica por diez tu influencia

=  Epílogo

FICHA TÉCNICA:

1 Libro

208 Páginas

En formato de 15.5 por 23.5 cm

Pasta delgada en color plastificada

Primera edición 2023

ISBN 9788411720724

Autor Tommy Spaulding

Ediciones Obelisco

 

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Correo electrónico:

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EL ARTE DE INFLUENCIAR 

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1 comentario:

  1. EL ARTE DE INFLUENCIAR Autor Tommy Spaulding Editor Obelisco

    Cómo provocar un impacto duradero y que cambie tu vida en tus interacciones cotidianas «Lo que define tu trabajo u organización no son los productos y servicios que ofreces, sino las relaciones que mantienes con las personas a las que ofreces estos productos y servicios» (Tommy Spaulding)

    Los investigadores creen que una persona corriente influirá sobre hasta 80 000 personas –es decir, 2,8 personas al día– tanto positiva como negativamente a lo largo de su vida. Si prestáramos atención a este hecho, ¿qué haríamos de manera diferente? ¿Actuaríamos de manera distinta? ¿Serían también diferentes nuestras interacciones con familiares, amigos y colegas? ¿Acaso dedicaríamos más tiempo a centrarnos en las personas que tenemos delante y menos en las redes sociales y los teléfonos móviles? Tommy Spaulding cree que la respuesta es sí... Spaulding aborda el tema de la influencia y el impacto en esta guía práctica que es a la vez convincente y profundamente personal

    El autor explora cómo podemos ser más conscientes y efectivos a la hora de ejercer la influencia que cada uno de nosotros tiene sobre los demás: en nuestras profesiones, en las interacciones cotidianas y en las relaciones que cultivamos a lo largo de la vida

    El arte de influenciar ofrece algo más que «pensamientos y oraciones» a las personas necesitadas y transforma nuestras vidas

    EL ARTE DE INFLUENCIAR Autor Tommy Spaulding Editor Obelisco

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